miércoles, 14 de enero de 2009

Sin paz, sin amor

Leyendo la portada de Clarín los principales artículos de hoy son: por un lado la baja en la tasa de matrimonios y por otro la guerra en Gaza. Pienso que no es casualidad que esto acontezca, es un signo de estos tiempos; así como firmar un tratado de paz por obligación no tiene el menor sentido; sucede lo mismo con una unión matrimonial.
En el primero de los casos para lograr la paz tenemos que tener la convicción de eso, desearlo, olvidar rencores, renunciar a muchas posiciones y dejar de odiar, dejar ser egoístas.
En el segundo de los casos también renunciar al egoísmo es fundamental, entregarse a lo sentimental y dejar de lado el materialismo; también como el otro caso tener la convicción total de la pareja a formar.
Vivimos en momentos donde el materialismo es lo fundamental, donde el dinero es lo más importante, donde los gobernantes se preocupan más por acumular poder que por el bienestar de la población; donde se invierten miles de millones para "salvatajes" de organizaciones usureras en lugar de luchar contra el hambre y generar trabajo; donde nos inculcan odio por alguien diferente; el odio es lo que triunfa en Gaza, en Sudán, en el Congo, en el mundo; con odio no hay paz ni amor.
Algo para destacar es lo siguiente: uno de los libros más cuestionados de la biblia es "Cantar de los Cantares" (en hebro "Shir (canto) hashirim (plural de canto"), cuando se discutía entre los sabios judíos de ese momento que libros iban a ser canónicos en el Tanaj (biblia hebrea que luego los cristianos adoptaron como "Antiguo Testamento"), Rabí Akibá dijo que ese era el primero que tendría que estar; porque refleja el verdadero sentimiento del hombre, el amor apasionado e incondicional por una mujer, que según los sabios es lo que más se acerca al amor de un hombre por Dios.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Me encantó lo que escribiste :) Ceci.

Gabriel Julián Sus dijo...

Muchas gracias Ceci, cuando quieras participar avisame.