Dos viajes, dos realidades

Jerusalem y Brasilia se encuentran a miles de kilómetros de distancia, a varias horas de vuelo y también son muy diferentes los huéspedes que recibirán en los próximos días; como así también el objetivo de cada uno de ellos.

El primer viaje que quiero comentar es el de Su Santidad Benedicto XVI, quien a pesar de todo el peligro que puede representar esta visita, recorrerá la Tierra Santa de cristianos, judíos, musulmanes y porque no de toda la humanidad; aterrizará en el aeropuerto Ben Gurión para recorrer diferentes ciudades de Israel, los territorios administrados por la Autoridad Palestina y Jordania, siendo uno de los objetivos más importantes llevar un mensaje de paz a una zona castigadas por infinidad de conflictos; por otra parte seguir con la obra de Juan Pablo II afianzando los lazos fraternales entre judíos y católicos, que lamentablemente no fueron de lo mejor a lo largo de los siglos.

El otro viaje que voy a comentar es mucho menos feliz; como digo siempre no quiero hacer una utilización política de esta bitácora, pero sí defender los derechos de cualquier ser humano en este mundo (así como en su momento criticamos junto a Quique el proyecto de ley de legalizar el aborto en Uruguay); desgraciadamente en pocos días tendremos muy cerca de Argentina a un presidente líder en violaciones de los derechos humanos, de la libertad de expresión, de los derechos de la mujer, perseguidor y encarcelador de periodistas (generalmente de las mujeres que se dedican a esta profesión como Roxana Saberi), una de sus máximas "virtudes" es ser negacionista del holocausto, y alentador de la aniquilación de un país en particular (Israel); lo peor es que seguramente traerá su mensaje de odio y guerra a estas latitudes. No se olviden de su escandalosa apertura en la conferencia que organizó Naciones Unidas contra el racismo (más conocida como "Durban II"), eso es Ahmadinejad, eso es lo que trae Lula a Brasil, ni más ni menos.

Quiera Dios que el mundo siga el mensaje de paz de Su Santidad y de otros líderes de diferentes credos a favor de la paz y no de los promotores de la violencia y el terrorismo en el mundo.